Tres meses con cuatro días han pasado desde que Argentina se coronó campeona del Mundial de Qatar 2022 tras vencer a Francia vía una infartante definición a penales. Randal Kolo Muani tuvo en sus pies una chance de cambiar el destino del encuentro, pero en frente se encontró con un gigantesco Emiliano Martínez que le dejó el grito de gol atorado en la garganta. Y esa es una herida que el francés todavía no está ni cerca de poder cerrar.

94 días exactos han transcurrido desde que la Copa del Mundo de la FIFA en Medio Oriente llegó a su fin, y el propio delantero francés ya reconoció hace un tiempo que "pensaré en la atajada del Dibu por el resto de mi vida", por esa jugada que ambos protagonizaron en el minuto 123 de partido. Sin embargo, ahora volvió a hablar y deja en evidencia que no ha logrado sanar.

"No voy a mentir, lo odio"

En conversación con L'Equipe, el ariete del Eintracht Frankfurt lamentó que "esa jugada podría haber cambiado mi vida. Hubiera preferido dejarlo en un segundo plano como todos los demás, como todos los franceses, pero sucedió y estos son los caprichos de la vida".

"Sigo mirando la jugada y veo que tengo muchas posibilidades de marcar, pero en el campo va todo demasiado rápido. Quiero seguir adelante, porque es parte de mi trabajo. No es que esté triste, pero no lo voy a olvidar nunca. Estuvimos muy cerca de traer la tercera estrella. No voy a mentir, lo odio", complementó Kolo Muani.

Para finalizar, Kolo Muani confiesa que ha visto varias veces la repetición de la final de la cita planetaria en la que cayeron ante la Scaloneta, y también cree que podría haber tenido otra definición ante el cuidatubos del Aston Villa.

"Podría haber buscado otras soluciones, picarla o encontrar a Kylian (Mbappé) porque estaba en un buen ángulo, pero en el momento no lo veo porque la pelota llega y voy enfocado en el arco", concluyó.