Blas Armoa se ha transformado en el nuevo nombre que Colo Colo busca para reforzar su plantilla de cara a la temporada 2023. El elenco albo fijó su mirada en el paraguayo, de gran semestre en Tigre de Argentina, anotando ocho goles en 22 partidos. Además, su corta edad (22 años), lo vuelven un jugador fácilmente exportable.

Sin embargo, no se trata de una negociación fácil para Colo Colo. Y es que los albos tienen la segunda opción en la historia. El pase del jugador pertenece a Sportivo Luqueño, pero Tigre tiene la opción de compra prioritaria producto de que jugó ahí en el semestre pasado.

Los albos, a la expectativa de lo que pase con eso. La clausula es hasta el 31 de diciembre y en caso contrario debe volver a entrenarse con el club paraguayo a la espera de lo que pase con las ofertas.

Situación que aclaró el vicepresidente del Sportivo Luqueño, Juan Darío Cáceres, que en conversación con Al Aire Libre señaló que Tigre "no dispone del dinero, tenemos que ver qué pasa, si no hacen uso de la opción, Armoa tiene que volver a Luqueño. Creo que era un un millón de dólares. Hay que negociar y es hasta el 31 de diciembre es la opción. Si no cumple Tigre, tiene que volver".

Además, le aclaró a Colo Colo que tiene las puertas abiertas para hacer una oferta por el jugador una vez culminado el plazo fatal de Tigre. "Si hay una buena oferta por él, el club no se va a oponer. El cumplió con creces por el club, y jugar en un equipo grande de Sudamérica como Colo Colo será fantástico para él y nosotros", señaló.

Armoa ha estado presente en todas las selecciones paraguayas en las inferiores y de acuerdo a varios especialistas, su destino obvio es el fútbol europeo. Por lo mismo, Daniel Morón posó sus ojos sobre él, pensando en una operación similar a la de Pablo Solari.