Los primeros minutos de Chelsea ante Real Madrid en el partido de ida de las semifinales de la Champions League pudieron presagiar un vendaval de goles para los ingleses. Sin embargo, solo Christian Pulisic pudo embocarla y Karim Benzema igualó para rescatar un empate que parece le sirvió a ambos.

Para el técnico de los blues, Thomas Tuchel, las cosas pudieron ir bastante mejor para los suyos y aplaudió su desempeño. "Hemos jugado una primera gran parte, fuimos muy fuertes no tuvimos suerte. Encajamos a balón parado, eso no me gustó. Merecimos ganar este partido en la primera media hora, la segunda fue un partido táctico", apuntó.

El entrenador alemán se aferra a la fortaleza en la zaga de los de Stamford Bridge. "Defendemos como un bloque, no quiero apuntar a nadie, todos han de defender, deben ser responsables para el equipo. Pero insisto en que es difícil hacer una primera parte tan buena como la nuestra. Nos faltó la toma de decisiones. Pero no podemos tener remordimientos. Sufrimos, pero es lo que tocaba", puntualizó.

No quiso lamentar demasiado las ocasiones desperdiciadas, especialmente el mano a mano de Timo Werner en el que no pudo batir a Thibaut Courtois. "Hay millones de personas que fallan ocasiones, esto es lo bueno del deporte, estás enfadado, seguro que estará, es un tipo muy profesional, pero desde entonces se enfocará en el siguiente partido".

Es por eso que se enfoca en la vuelta, donde Chelsea será local ante Real Madrid. "Son dos partidos que demandarán mucho esfuerzo físico y mental. Se ha jugado muy rápido. Es un reto este partido de vuelta e ir paso a paso. La sensación es de creer, de seguir empujando", indicó.