El Manchester United pasó de ser un equipo en reestructuración a uno de los grandes protagonistas de la Premier League. Este domingo los Diablos Rojos se impusieron con una goleada por 3-0 ante el Leicester City, con Marcus Rashford como la gran figura una vez más.
Luego de la polémica salida de Cristiano Ronaldo, muchos apostaban por un futuro incierto para los pupilos de Erik ten Hag. No obstante, una de las estrellas jóvenes del fútbol inglés se ha puesto la capa de héroe y ha liderado a su equipo hasta tenerlo en la pelea en los primeros lugares.
Si bien eran visitas, el Leicester City no se intimidó en ningún momento. Los Foxes buscaron por todos lados la forma de hacer daño, pero se encontraron a un David de Gea que estuvo notable cada vez que lo exigieron en la portería.
Las cosas parecían complicarse para el Manchester United, pero en los 24’ Marcus Rashford dio su primer golpe. Recibiendo un balón libre por la derecha, encaró hasta entrar al área y fusilar el arco, anotando el 1-0 de la ventaja.
Los Diablos Rojos no hicieron un buen primer tiempo y esto se lo hicieron saber en el descanso. La actitud en el complemento fue totalmente distinta, lo que les permitió adueñarse del balón, controlar las acciones y sellar la victoria.
En los 55’ nuevamente Marcus Rashford diría presente tras un balón con espacio que lo llevó a meterse al área y anotar el 2-0. Su posición dejó dudas y el VAR debió intervenir, pero se confirmó la conquista con la que llega a seis en cinco partidos en la Premier League. Eso sin contar el gol al Barcelona en Europa League el jueves pasado y otro en la Copa de la Liga de Inglaterra.
Con el partido controlado, los Diablos Rojos tendrían una celebración más en el bolsillo. Fue en el 61’ cuando Jason Sancho se juntó con Bruno Fernandes y frente al arco empujó la pelota para el 3-0 que puso punto final a la goleada.
Manchester United consigue tres puntos y le mete presión a los líderes de la Premier League. Con 49 unidades, se pone a tres del Manchester City y cinco del Arsenal, con torneo aún por delante para soñar con el título.
