La primera presentación de Diego Armando Maradona en suelo chileno fue el 11 de marzo de 1980, cuando Argentinos Juniors trajo a su joya para disputar un amistoso frente a Colo Colo de Carlos Caszely en el Estadio Nacional.

Fue victoria alba por 3-2, pero el partido no terminó, ya que el mal arbitraje de Víctor Ojeda generó una batahola y el público invadió la cancha en búsqueda de algún recuerdo del joven Diego, que tenía 19 años y ya contaba con fama de nivel mundial.

El astro argentino, fallecido este miércoles, no lo pasó bien. Una fuerte infracción de Leonel Herrera terminó con El Pelusa lesionado y atendido en la Posta Central, el hospital de urgencias más importante del país. Una escena que el recio zaguero recuerda con detalle en conversación con Redgol.

"No fue para tanto. Además fue una broma de mal gusto. Había varios jugadores a los que les tiramos fierrazos, no solamente Diego. Pero no lo pudimos agarrar. Cuando lo lesioné faltaban cuatro o cinco minutos y fue por la orilla, arco sur, lado derecho, le dejé el pie un poco más arriba y lamentablemente lo lesioné", recuerda el subcampeón de Copa Libertadores en 1973.

"Ya quedaba muy poco y no me arrepiento tampoco, porque son cosas del fútbol. Ni siquiera me mostraron tarjeta amarilla. Entonces tampoco se vislumbró como un tremendo foul, descalificador, como para que me sancionaran", asegura Herrera.

Según el ex mundialista chileno, el hecho de que hayan llevado a Maradona a la Posta Central se debía a su rótulo del crack: "Fue por lo que significaba, por lo que era la figura. Pero fue demasiado llevarlo a la Posta Central, porque a la larga no pasó mucho tiempo, se recuperó rápidamente y estuvo jugando de nuevo. No era una lesión muy preocupante".

"El estadio estaba lleno, impresionante. Dentro de la cancha no se podía caminar cuando abrieron las puertas, porque se metió toda la gente a abrazarlo, a saludarlo, a sacarse fotos con él. Inclusive fue tanta la cosa que nosotros también teníamos interés de sacar una foto y no se pudo por la multitud que había dentro de la cancha. Y eso era normal por los pergaminos que él traía, lo que podía ser", recuerda el ex futbolista.

Dos hombres en la marcación de Maradona
 

Herrera recuerda esa noche en el Nacional: "Tuve la gran oportunidad de enfrentarlo y jugar contra él, era un jugador que tenía todas las condiciones y en esa época, cuando venía recién apareciendo en el fútbol, ya se notaba que iba a ser un crack de nivel mundial".

"Le hicimos una marcación mixta por sus antecedentes. Había que marcarlo de forma escalonada, una marcación individual y otro (defensa) un poquito más atrás por si acaso", asegura a 40 años de esa noche.

"Pero con la habilidad y la velocidad que tenía, se sacaba a uno o dos jugadores de encima sin ningún problema. Yo decía que él tenía una mano en el pie, cómo lo movía para cualquier lado, era lo más difícil para poder marcarlo", rememora el ex defensor, apodado en sus años como Patitas con Sangre.

Finalmente, Herrera revela la visión crítica que tiene sobre la muerte de Maradona. "Es lamentable su fallecimiento, pero él también se lo buscó. No tenemos que descartar lo espectacular que era como futbolista, pero como persona creo que dejó mucho que desear también", completa.