La fiesta que la mayoría de los hinchas curicanos prepararon para recibir al plantel en la ciudad, luego del empate ante Colo Colo que significó la clasificación a una copa internacional por primera vez en la historia del club, terminó de mala manera por culpa de un par de personas que agredieron a jugadores.

Ronald De la Fuente, lateral de los torteros, relató los momentos de terror que le tocó vivir al equipo. "Se abrió una escotilla para saludar a los hinchas que estaban y poderlos ver, porque las ventanas eran polarizadas. La mayoría eran familias e incluso adultos mayores", contó en Radio ADN.

El ex Colo Colo y U. de Conce comentó que esa decisión fue horrible. "Iban a ser cinco minutos. Pero justo pasó un camión por al lado, el cual fue violentado, lo obligaron a detenerse y fue ocupado por los delincuentes para subirse al bus", indicó dejando en claro que los que causaron los incidentes son antisociales.

Ahí detalló lo que vivieron Diego Coelho y Byron Oyarzo. "Violentaron a Diego Coelho, le robaron su polerón. Les explicamos que no estábamos en condición de regalar la indumentaria porque no abunda la ropa", e incluso, para calmar las pasiones, buscar una solución: "Se les ofreció que, una vez terminado el campeonato, no había problema de entregarles todo y no reaccionaron bien".

"Diego Coelho logró entrar al bus, pero como Bayron fue el último en entrar, fue violentado", siguió el relato el defensor. "Le trataron de sacar su polera a la fuerza y después fue golpeado, primero con un combo por la espalda y luego con una patada", indica.

Por eso pide detener de una vez por todas la delincuencia y los hechos de violencia en el fútbol. "Fueron un par de golpes, pero pudo terminar peor porque estas personas estaban bajo efecto de las drogas, estoy seguro. Pudo terminar en algo fatal. Hay que ponerle fin a estos episodios", dijo De la Fuente.

Finalmente detalló que Oyarzo "no entrenó hoy y está conmovido por la situación que vivió. Su familia está preocupada y con temores por lo que pasó. Como se ha hecho público, tienen miedo de algún tipo de represalia".