Si bien es cierto el Bayern Munich era favorito para ganar la llave de cuartos de final de Champions League frente al Barcelona, nadie podía  preveer lo que ocurrió este viernes en Lisboa donde los germanos golearon 8-2 a los catalanes.

Terminada la paliza, Gerard Piqué, uno de los históricos del Barça dio la cara y ofreció dejar el club para darle paso a sangre nueva.

"Partido horrible. Sensación nefasta. Vergüenza. No se puede ir así por Europa. A reflexionar todos. El club necesita cambios. Nadie es imprescindible, soy el primero que me ofrezco en irme. Hemos tocado fondo”, aseguró el segundo capitán del Barcelona.

¿Se quedó ahí? No, porque Piqué además, afirmó que “llevamos unos cuantos años que no importa quién es el entrenador nosotros ya no competimos en Europa”