Un escándalo sacude al fútbol internacional en esta fecha FIFA. Nigeria, que debía enfrentar a Libia este martes por las Eliminatorias africanas, acusó una fea artimaña de su rival. Dicen que los libios los matuvieron como rehenes, sin comida ni agua, en un aeropuerto del país.

William Troost-Ekong, capitán de Nigeria, denunció la terrible situación en redes sociales. “Más de 12 horas en un aeropuerto abandonado en Libia luego de que nuestro vuelo fuera desviado cuando descendía. El gobierno libio anuló nuestro aterrizaje en Bengasi sin ningún motivo”, informó.

Cerraron las puertas del aeropuerto y nos dejaron sin conexión telefónica, comida ni bebida. Todo para hacer juegos mentales”, dijo, y agregó: “He vivido cosas así jugando en África, pero esto es vergonzoso. Incluso el piloto dijo que nunca había visto algo así antes“.

Hemos pedido al gobierno nigeriano que intervenga y nos rescate. Como capitán, junto con el equipo hemos decidido que NO jugaremos este partido. La CAF debería analizar el informe y lo que está sucediendo aquí. Incluso si deciden permitir que se juegue, que se queden con los puntos”, disparó.

Nigeria acusa una terrible situación en Libia, donde este martes debían jugar por las Eliminatorias africanas | Twiter (@WTroostEkong)

Nigeria se baja del partido contra Libia y acusa trato inhumano

No aceptaremos viajar a ninguna parte por tierra porque, incluso con seguridad, es peligroso. Solo podemos imaginar qué hotel o qué comida nos hubieran dado si continuábamos“, siguió diciendo William Troost-Ekong, quien milita en el Al-Kholood de la Liga Profesional Saudí.

Horas más tarde, destapó otro grave hecho. “¿Los puedo sorprender? El piloto nos acaba de decir que este avión siempre tuvo combustible. Nos podrían haber dejado ir, pero no nos han dado permiso. ¿Lo pueden imaginar? ¿Cuánto tiempo nos quieren tener rehenes?“, denunció.

“Después de mis publicaciones, mágicamente llegó un bus y el conductor, que anoche estaba afuera del aeropuerto grabándonos y riéndose de nosotros con sus colegas, nos dijo que el vehículo estaba listo… 12 horas después de que aterrizamos. Ya estoy aburrido de reírme para no llorar“, dijo.