El escándalo producido en Finlandia por la participación de la Primera Ministra, Sanna Marin, en una fiesta privada parece llegar a su fin luego de que la política se sometiera, voluntariamente, a una prueba de drogas "para limpiar su reputación".
El objetivo de Marin es descartar los rumores que aparecieron en las redes sociales, después de la fitración de un video en que se observa a la Primera Ministra cantando y bailando en una fiesta.
La política socialdemócrata negó haber consumido drogas y haber visto que alguien las consumiera. Pero, pese a esa declaración, políticos opositores y medios de comunicación solicitaron que se hiciera la prueba de drogas para transparentar lo sucedido. El viernes, Marin aseguró que "nunca en mi vida, ni siquiera en mi juventud, he consumido drogas. Ojalá viviéramos en una sociedad en la que se pudiera confiar en mi palabra. Pero como ahora quieren levantar esas sospechas, por eso me hice la prueba".
La mandataria agregó que "estos videos son privados y grabados en un espacio privado. Me molesta que estos se hayan dado a conocer al público. Pasé una noche con mis amigos. Simplemente festejamos, también de manera bulliciosa. Bailé y canté (...) No estoy siendo chantajeada. Estos son videos privados y se suponía que no debían ser públicos. Se grabaron este verano y en una casa privada. No voy a decir de quién es la casa".

El resultado del test de droga

La Oficina del Gobierno finlandés informó durante esta jornada que el test de drogas al que se sometió la Primera Ministra el pasado viernes fue negativo, confirmando que la política finlandesa no consumió estupefacientes durante la comentada fiesta.
El Ejecutivo expuso, en un breve comunicado, que "no se ha encontrado ninguna droga en la prueba a la que sometió la primera ministra Sanna Marin el 19 de agosto de 2022", aclarando que Marin pagó el test, el que fue realizado en una clínica privada.