Está lejos de ser un secreto que el rendimiento de Álvaro Morata en la Eurocopa está lejos de ser el mejor luego de una fase de grupos con España en la que falló oportunidades claras de gol que fueron una de las causas para que su equipo tuviera que sufrir hasta el último partido para avanzar a los octavos de final.

Los señalamientos han llovido para el atacante de la Juventus pero las críticas fueron más allá de lo futbolístico y lo han llevado al plano personal por lo que decidió contar su mal momento. "Estos días he recibido amenazas, insultos a mi familia, que ojalá se mueran mis hijos... pero estoy bien, quizás hace unos años hubiese estado j*dido", dijo a la Cadena Cope.

El exjugador del Real Madrid confiesa que estuvo muy afectado tras el segundo compromiso de los dirigidos por Luis Enrique en la competición. "Tras el encuentro ante Polonia estuve nueve horas en la cama sin dormir. He pasado unas semanas aislado de todo, centrado en mi trabajo", añadió.

También respondió a los aficionados que lo silbaron en el estadio La Cartuja de Sevilla. "Parte del público me pita porque es lo que escucha, pero yo lo doy todo en el campo. Yo doy la vida por la selección. Si ante Suecia o Polonia hubiésemos ganado 3-0, al final el estadio hubiera hecho la ola", puntualizó.

"Cada cosa que digo o no digo es interpretada de muchas maneras, pero ojalá la gente se pusiera más en mi piel. Quizá en el campo no he hecho mi trabajo todo lo bien como debería. Entiendo que se me critique porque no he metido un gol, pero ojalá la gente se pusiera en mi lugar en cuanto a recibir amenazas, a que te digan que se mueran tus hijos", apuntó Morata.