El dueño del Circo del Tony Caluga, Abraham Lillo, entregó nuevos antecedentes sobre el fallido espectáculo que tenía comprometido con Marcianeke y al que el artista llegó cuando la gente ya se retiraba de la carpa actualmente desplegada en la comuna de Quillota.

Abraham Lillo partió contando en Hola Chile lo que ocurrió el 19 de enero, cuando teniendo la carpa llena con alrededor de 600 personas esperando al artista, este no llegó a cumplir con el espectáculo y sólo apareció tres horas más tarde de lo pactado.

“El tema fue hacer algo simpático, traer al artista del momento, fue algo entretenido. Porque el circo aquí en Quillota se transformó en una sala de eventos. Hemos traído hartos artistas. Y se me ocurrió, por parte de mis hijos que me dijeron ‘papá, ¿y por qué no trae a Marcinaeke?’. Hicimos las averiguaciones y trajimos a Marcianeke al circo“, recordó Lillo en conversación con Hola Chile.

“En el inter tanto, nos ganamos un repudio de la población, porque Marcianeke no era para traerlo pal’ circo, porque no era un personaje que aportaba a los niños y todo el tema. Peleamos con hartas personas, porque al final uno tiene que tener diversidad. Tenemos artistas para adultos, tenemos artistas para jóvenes”.

Sobre la misma jornada, Abraham lamentó que “el día del show fue un parto. Fue un tema demasiado fuerte. No llegó. Siempre venía de Santiago. Lo empecé a llamar a las ocho y siempre estaba en 20 minutos, 20 minutos, 20 minutos y nunca llegó”.

“Eran 20 para las 12 y ya recién venía entrando a Quillota y ya habíamos tomado la decisión de suspender. Mientras, nos pintamos de payaso, bailaron allá adentro los niños, concurso con los niños, regalos, cama elástica, trajimos a unos muchachos a unos cantantes de allá de Limache. Alargamos el show”.

Tres veces pedimos disculpas, le pedíamos y le avisábamos a la gente; nos decía que venía llegando y nosotros le creíamos. También diciéndole a las personas que estaban molestas, que querían devolver los boletos, le dábamos la posibilidad de devolver los boletos sin ningún problema y la gente se quedaba, hasta que ya eran las 11 y media y ya tomamos la decisión de suspender el show”, añadió.

Por lo menos, “la reacción de la gente fue un siete. Incluso un aplauso. La gente supo que no era responsabilidad nuestra”.

Marcianeke vs. el Circo del Tony Caluga: ¿Qué pasó cuando llegó el artista atrasado?

Abraham Lillo posteriormente pasó a describir lo que ocurrió cuando Marcineke finalmente apareció en el lugar pasadas las 12 de la noche, a pesar de que el show estaba pactado para las 9 de esa velada.

“Lo primero que pasó, llegaron 8 vehículos acompañando a Marcianeke. Cada vehículo traía como 4 o 5 acompañantes y yo no conversé nunca con Matías, yo conversé con el manager de Marcianeke y él me culpaba a mí. Me decía que yo tenía que haberle tenido una función. Yo le dije ‘pero si yo contraté el show de Marcianeke'”, explicó Lillo.

Entonces cuenta que el responsable de manejar a Marcianeke le respondió “‘no, es que tú tienes que tener una función antes, porque nosotros funcionamos así’. Le dije ‘no, tú nunca has trabajado en circo, primera vez que trabajai en circo’. Echándome la culpa a mí”.

“Como me echaba la culpa a mí, yo me indigné y le hablé un poco fuerte. Cuando le hablo fuerte, se me colocan como seis personas alrededor mío. El equipo de Marcianeke. Y ahí como que se me bajaron un poco las revoluciones, conversamos buena onda para no tener algún problema”, comentó ya entre risas nerviosas, por la situación que tuvo que enfrentar.

Marcianeke vs. el Circo del Tony Caluga: ¿Qué pasó la segunda vez que el artista falló?

El pasado 4 de febrero iba a haber una segunda función, la que al menos fue suspendida cuando unos sucesos previos le dieron mala espina al dueño del circo y quiso evitar que se repitiera el bochorno de mediados de enero.

“Yo había decidido suspender. Lo poco y nada que conversé con ellos, indignado yo ya ni siquiera me despedí de ellos. El otro día me llamaron los medios de Quillota en la mañana y yo avisé que iba a suspender que no iba a hacer función y que toda la gente que quedó con entradas que podían venir a retirar sus boletos (devolución)“, explicó.

Sobre cómo llegaron a agendar una segunda función, Lillo contó que “el representante me llama en la tarde pidiéndome disculpas, a darme las excusas, hubo un nivel de irresponsabilidad grande porque el muchacho se andaba tomando fotografías en el mall, comprando ropa, tenía que grabar un videoclip. Me pidió las disculpas pertinente, me dio otra fecha, la del 4 de febrero y yo acepté. Sí, es que yo soy fácil para algunas cosas”.

“Es que había que recuperar lo invertido. Tú sabes que las cosas están difíciles”, puntualizó.

En ese momento, Eduardo de la Iglesia le preguntó “¿es muy caro tener a Marcianeke? ¿Es un artista caro hoy día conseguirlo, tenerlo? Porque es el fenómeno”.

“Mira, Marcianeke salía 7 millones de pesos, 45 minutos de show”, dijo Abraham Lillo, sin guardarse nada. “Yo quiero que la gente entienda que para nosotros es un negocio. El circo lleva mucho tiempo sin poder hacer nada, cualquier negocio que nos salga, podemos salvar un par de semanas, un mes para vivir con tranquilidad”.

Finalmente, el show tampoco se realizó, porque el artista no llegó a una actividad previa que tenían pactada. Esa fue la segunda vez que Marcianeke le falló al Circo del Tony Caluga.Abraham simplemente decidió cancelar definitivamente el show.

“Todavía estoy esperando que me devuelva el anticipo”, cerró Lillo en referencia a los 2 millones de pesos que le entregó en efectivo al artista por esa segunda fecha cancelada. “Se lo fui a dejar yo mismo a su casa”.