[[Lionel Messi]] es el blanco de todas las miradas en el Mundial de Rusia. Y el diario Clarín lleva este sábado una decidora crónica del presente de La Pulga. El crack de Barcelona está en una encrucijada mental que tiene su ánimo por el suelo. Y con él, también Argentina.
“Y Lionel Messi está igual: roto. Por dentro y por fuera. No hay reacción el día después de una nueva frustración con la camiseta de su país”, dice respecto a la jornada de ayer, luego de la derrota trasandina ante Croacia que dejó a la Albiceleste con un pie fiera del Mundial.
“No hay caso, por más ganas que le meta, por más preparación, por más dosificación de energía que haya planificado hacer en la última parte de la temporada en Barcelona, hay algo que no está al alcance de sus manos. Es algo que le escapa a cualquier plenitud física y futbolística que pueda alcanzar. Es el bloqueo mental que lo somete cuando algo se interpone entre su camiseta 10 y el éxito en la selección”, agrega el reporte.
Luego repasa el andar de La Pulga en las últimas horas. No habló con nadie después del partido. Fue el primero en caminar al camarín y luego en salir de él, en una hilera que encabezó el presidente de la AFA Claudio Chiqui Tapia. Volvió a Bronnitsy y se enfundó en su habitación junto a Sergio Agüero, sin cenar.
Ayer reapareció en los trabajos físicos, pero nuevamente distante y con la vista perdida. “Sin sonrisa, con el alma rota”, refrenda el diario Clarín, que ruega porque”de manera mágica, el capitán se cure de lo que sea que le esté pasando y sea de nuevo el guía de la ilusión celeste y blanca”. Un desafío contra el reloj.
El triunfo de Nigeria sobre Islandia abrió una ventana para [[Argentina]], que suma ahora opciones de clasificar a octavos de final, siempre que le gane a los africanos en el último partido del grupo, el próximo martes en San Petersburgo; y que además los vikingos no derroten a Croacia.
Fotos: Agencia Uno