En Universidad de Chile están enfocados en enterrar el horrible año 2021 que debieron vivir, donde se peleó el descenso hasta el último minuto. Por lo mismo, con la llegada de Santiago Escobar se esperan nuevos bríos en el CDA.

Así lo siente Pablo Aránguiz, el volante que tiene un gran talento pero que no ha podido explotar en el cuadro azul. Algo que espera cambiar esta temporada y para eso está agarrando confianza en esta pretemporada de la mano del estratega colombiano.

"El profe me dice que sea bastante activo, que aproveche mis habilidades y mis virtudes en el uno contra uno, y también, con los centros y las habilitaciones", dijo Aránguiz. "Estas semanas nos han servido mucho con los amistosos que hemos tenido. En lo personal me siento bien y confiado de que será un gran año. Estamos con mucha ilusión", complementó.

Por lo mismo, incluso cambiará el dorsal que ha usado en el Bulla desde que llegó. "Para cambiar, para cerrar etapas, decidí cambiar el número 22 y empezar a usar el 8", confesó el ex seleccionado nacional.

Luego señaló que las críticas de la barra azul las toma en cuenta, pero no tanto como al DT. "A los que yo tengo que convencer es a los técnicos que tengo de turno, sabiendo la importancia de la hinchada en esta institución. Pero yo estoy confiado en que será un buen año, me había costado retomar el nivel con el que llegué. Ahora estoy bien físicamente", manifestó.

El formado en Unión Española agregó que "estamos ansiosos de que comience el torneo. Han sido semanas de buen trabajo, buenas semanas de preparación y han llegado compañeros nuevos que se han adaptado bien al club".