Los debut siempre son difíciles, pero el de Cristián la Nona Muñoz por Universidad de Chile se pasó. Data del año 2003 y, siendo un joven, le tocó una jornada para el olvido el El Teniente de Rancagua.

 

“Imagínate mi debut. Recién nos subieron al plantel y me citan para un amistoso en Rancagua con Colo Colo. El utilero, que se portó muy bien conmigo, me dijo que acá no era como en la juvenil, que acá se perdía un balón y podía terminar en gol. Que evitara los cambios de juegos, que jugara corto”, contó el volante a Pelota Parada de CDF

“Me tocó jugar los últimos 20 minutos. Veo un cambio de juego de simple, lo meto y se la dejé en el pecho a Barticciotto. Él habilita de primera a Mario Cáceres, gol. 2-1 perdimos”, prosiguió ante la sorpresa del panel.

Pero no quedaría ahí. Para colmo de males, tras recibir una dura reprimenda en el vestuario, le quedaría aún una plancha más por pasar: se equivocó de bus y casi se viene a Santiago con Colo Colo. 

 

“Imagínate. Entré al camarín y el utilero me dice ‘se lo dije o no’. Me siento, el técnico me revienta. Salí ido del camarín y en la salida había dos buses iguales. Me subo y veo a Claudio Bravo sentado al medio”, lanzó entre risas. 

 

 

Finalmente, contó que el luego bicampeón de América tenía confianza. “Lo conocía de la selección y me dice ‘hue’ón, ¿qué estai haciendo en este bus? Es el de Colo Colo. ‘Uh, disculpa’, dije y me fui al de la U”, remató.