Nadie ha quedado ajeno a la celebración de Universidad de Chile. Este domingo 24 de mayo, el cuadro laico celebra un año más de vida y jugadores, hinchas e históricos le han dedicado hermosas palabras al club.

En conversación con Radio Agricultura, varios ídolos del Chuncho recordaron su paso por el club y dejaron emotivos mensajes de agradecimiento. Revisa cada uno de ellos:

Carlos Campos

El Tanque es el goleador histórico del club, ídolo para los hinchas y pieza clave del Ballet Azul. Sobre su cariño al club, Campos destacó que "la U es mi vida. Encima tengo el orgullo de pertenecer al Ballet Azul(...) Me acuerdo del título de 1963. Tuve que suspender mi matrimonio para jugar contra Colo Colo".

Carlos Campos, el Tanque. El máximo goleador histórico de Universidad de Chile

Carlos Campos, el Tanque. El máximo goleador histórico de Universidad de Chile

Patricio Mardones

El Pato es recordado por el histórico penal en El Salvador. La U llevaba 25 años sin salir campeón y aquel lanzamiento de Mardones le dio una nueva estrella al club. Sobre esto, el ex jugador azul reconoció que "cuando me tocó patear el penal en El Salvador no tenía ninguna duda que lo hacía. Siempre supe que le iba a pegar con el borde externo y fuerte. Estaba agrandado y me sentía bien".

Marcelo Salas

El Matador, ídolo azul y del fútbol chileno. El ex delantero fue bicampeón con los azules en la década del '90 y cerró su carrera en el club en 2008. Sus palabras fueron: "La U me abrió las puertas a todo lo que fue mi carrera. Quedé en el equipo y a la semana estaba entrenando con la sub 17; me hice hincha desde el momento en que llegué y lo soy hasta el día de hoy".

"Me emociona escuchar el relato del gol a la UC en 1994. Ese gol le quedó marcado a los hinchas de la U y a los de la UC. Hasta hoy me lo recuerdan mis amigos en algunas juntas. Es un gol con polémica", añadió sobre su golazo a la UC.

Marcelo Salas, el Matador. Ídolo del fútbol chileno

Marcelo Salas, el Matador. Ídolo del fútbol chileno

César Vaccia

El DT del bicampeonato 99-00 recordó que "cuando tomé el primer equipo venía de las divisiones inferiores; le pedí al equipo que confiaran en mí y Lucho Musrri me dijo que no me preocupara. Y así nos fue".

José Rojas

El Pepe fue el capitán del equipo dirigido por Jorge Sampaoli en 2011. Multicampeón con la U y campeón de América con la Roja. El zurdo confesó que "perdí a mi padre a los 12 años. Cuando levanté la Sudamericana, me acordé de él; con los años darte cuenta que quedaste en la historia del club es increíble".

"Cuando le ganamos 4-0 a Flamengo, no queríamos que terminara el partido. Nos salía todo. Al frente estaba Ronaldinho. Es uno de los mejores partidos en la historia del club", agregó.

José Pepe Rojas, capitán y multicampeón con la U

José Pepe Rojas, capitán y multicampeón con la U

Luis Musrri

Otro capitán multicampeón con la U. Ídolo del club y posterior entrenador junto a Víctor Hugo Castañeda. "Desde que fui a ver a la U al estadio con mi abuelo, yo le dije que iba a jugar ahí. Llegué al club y la camiseta se impregnó en mi piel", declaró.

Además, sobre el título del 94, Musrri señaló que "después de todo lo que pasamos, levantar la copa como capitán en El Salvador fue lo máximo. No volví a vivir algo así. Fue una deuda pagada. Devolví a la U al lugar donde debía estar".

Diego Rivarola

El trasandino se robó el corazón de todos los azules. Gokú se caracterizaba por dejar todo en la cancha y por siempre aparecer en los Superclásicos. El ídolo del Chuncho señaló que "en la U soy como un hijo adoptado que quiere tanto a su padre como si fuera su papá biológico. Estoy orgulloso de haber vestido esta camiseta".

Diego Rivarola, un delantero argentino que llegó para enamorarse de la U

Diego Rivarola, un delantero argentino que llegó para enamorarse de la U

"El gol a Colo Colo en 2011 marca un antes y un después. Pasamos de ser un equipo muy inestable a ser una U avasalladora. En los primeros entrenamientos de Sampaoli, nos mirábamos las caras y no entendíamos nada. Con el pasar de las semanas y los resultados, nos dimos cuenta que los trabajos no eran tan locos ni raros", añadió.