El fútbol chileno recibe este sábado 27 de agosto una increíble jornada de doble clásico universitario. Los planteles femeninos y masculinos de Universidad de Chile y Universidad Católica chocan en el Estadio Nacional y lo hacen bajo la atenta mirada de hinchas azules, quienes tuvieron un caótico acceso a la fiesta del balompié criollo.

Ya se había anticipado que, producto de los trabajos de remodelación del recinto ubicado en Ñuñoa pensando en Santiago 2023, los 25 mil fanáticos del Romántico Viajero que se dispusieron de aforo podrían hacer su ingreso únicamente por Avenida Grecia, y todo fue un caos.

Solo tres accesos estaban habilitados: uno para Andes, otro para Galería Norte -ya que la Sur está cerrada-, y otro para la Tribuna y la puerta 10, por lo que se generó un gran atochamiento de forofos del Chuncho desde bien temprano. Y con el pasar de las horas la cosa se fue poniendo lenta.

Tanto así, que el periodista Felipe Inostroza advirtió a través de Twitter que hasta familiares de las jugadoras azules se encontraban intentando ingresar al coloso ñuñoíno cuando restaban 10 minutos para que el preliminar clásico universitario femenino tuviera su pitazo incial. Lo que empezó a calentar los ánimos.

Cabe destacar igualmente que no solo los hinchas de la U la pasaron mal intentando ingresar al Estadio Nacional, sino que también parte de los trabajadores. Tanto los periodistas como los guardias que llegaron a trabajar al recinto igual se demoraron en entrar, ya que ambos grupos tenían la misma puerta de acreditación.

Sin embargo, tras una larga espera todo se regularizó y a pesar de lentitud pudieron ir ingresando poco a poco para comenzar a ubicarse en sus respectivos asientos y poder disfrutar de una gran jornada de fútbol femenino y masculino entre la U y la UC.