Universidad de Chile vivió momentos complejos en 2020, donde la tabla ponderada los acechó por gran parte del año, sin embargo, de la mano de Rafael Dudamel y contra todo pronóstico, los azules lograron terminar terceros y clasificados a Copa Libertadores.

Pese a que a principios de noviembre la U estba en un cómodo quinto puesto del Torneo Nacional, lo cierto es que la propuesta de Hernán Caputto no convenció a nadie, por lo que los directivos de Azul Azul decidieron jugársela por un experimentado estratega extranjero para reemplazarlo.

Rafael Dudamel aterrizó en Chile con la clara misión de evitar el descenso, el partido por la promoción, y lograr meterse en alguna competencia internacional, ya sea Copa Sudamericana o Libertadores. Pero el camino no fue fácil.

"El cambio de entrenador siempre significa un cambio de formas, unas más drásticas que otras, en cuanto a lo táctico y a las formas. Nosotros buscamos desde las nuestras sumarle intensidad, elevar los niveles del equipo. Al principio costó. Los jugadores sintieron la exigencia. Lo importante fue que el equipo se mantuvo sumando para mantenerse estable", relató el DT a Triángulo Deportivo.

El venezolano agregó: "no es sencillo pelear un descenso y menos en un grande como la U, es decir, se convivía con mucha tensión, mucha presión... con un nivel emocional muy alto y mucha angustia".

Pese a los momentos complejos, Dudamel aseguró que siempre tuvo fe en el potencial del plantel de la U para salir del mal momento:

"Al ver la capacidad individual del equipo estábamos seguros de que pasando esa primera etapa el equipo iba a poder salir a flote mejorando el rendimiento desde las exigencias físicas y los cambios tácticos", rrefleixonó.

El otrora DT de la Vinotinto añadió: "tuvimos un remate de campeonato como lo esperábamos, desde lo físico y táctico, y sobre todo desde la respuesta emocional. Es un equipo de jugadores de experiencia que supieron usar esa jerarquía en los momentos cruciales".

Rafael Dudamel también se dio el tiempo de referirse a las críticas de la prensa, mostrándose calmo y asegurando que "hay que respetar. Yo soy director técnico, no opinólogo, entonces yo tengo que respetar las opiniones de los medios, del fanático, del todo el entorno. Tenemos que saber convivir con ella (la crítica), es muy difícil tenerlos contentos a todos".

Eso sí, el venezolano tiene claro que "desde afuera hay muchas más emociones que razones, entonces digamos que hay que ser consciente de que cuando uno está dirigiendo a un equipo grande con trascendencia las dimensiones son diferentes, y si no sabes convivir con ellas, termina siendo imposible el trabajo en la cancha".

Dudamel demostró gran autocrítica al asegurar que muchas veces la crítica de la prensa especializada puede llegar a ser útil:

"Sin estar de oídos sordos, porque a veces en esas críticas uno alcanza a profundizar en las reflexiones individuales y colectivas con el cuerpo técnico para tomar mejores decisiones, porque nosotros no andamos por la vida creyendo que tenemos la verdad absoluta", aseguró.

Por último, el estratega de Universidad de Chile fue enfático en decir que jamás pensó en renunciar a la banca de la U:

"Hay ciertas formas y convicciones que nos mantuvieron hasta el final en el línea correcta para alcanzar los objetivos. En ningún momento (pensó en renunciar). Hay que saber convivir con las exigencias emocionales internas. A un entrenador le pueden llevar a tomar la decisión de abandonar el banco en dos situaciones: la cobardía, que no fue la nuestra, o el ver que tus jugadores no están respondiendo a tus formas y exigencias, y que es mejor no estar", cerró.