Universidad de Chile empató contra Deportes Iquique y se salvó de la derrota en los descuentos, en un duelo entre dos equipos que ocupan la parte baja de la tabla ponderada, además de la regular en los Dragones Celestes. Ambos necesitaban tres puntos urgentes y terminaron repartiendo unidades.

La U estaba obligada a quedarse con un triunfo para alejarse de Universidad de Concepción e Iquique, que por ahora ocupan los puestos de liguilla de promoción y descenso respectivamente. Como si fuera poco, La Serena se le arrancó al Chuncho.

“Me siento capaz de revertir esto, para eso trabajamos a diario. Hoy no podemos tapar el sol con un dedo, el rendimiento no nos respalda para poder discutirlo, pero nosotros somos los principales responsables, soy el líder de este grupo que lucha y quiere superarse cada día, y hasta el final lo haremos”, dijo el DT Rafael Dudamel tras el empate.

Agregó que “nos frustra no ver realizado en lo partidos lo que los jugadores trabajan en el entrenamiento, porque jamás voy a poner en juicio la entrega y disposición del plantel. En estas instancias nos falta tranquilidad, ante la necesidad entra la angustia y hemos hecho el trabajo correspondiente para que nos paralice, pero hoy se enfrentaron dos equipos que la palabra necesidad nos involucraba a ambos. Hubo coraje, valentía, rabia y el equipo logro el empate, pero quedan cuatro partidos y son 12 puntos en los que sencillamente está en juego todo el futuro de lo que se ha hacho. Hemos ganado muy poco con momentos buenos, regulares. Y no ganar condiciona cualquiera de esos aspectos”.

Además del fútbol y los resultados, a la U se le critica que públicamente no reconoce su complicado presente, que bien lo puede dejar en liguilla de promoción a Primera B al final de la temporada.

“El que apuntemos mate torneos internacionales no nos lleva a ser indiferentes ni a obviar una realidad. Cada día nos preparamos pensando en ganar con ilusión y la necesidad de cada triunfo. Si nos metemos ese pensamiento de ganar porque nos acercamos al descenso es más difícil, es taladrarte mentalmente. Pasa por preparar los partidos con el mayor optimismo, si no, nos matamos psicológicamente entre nosotros. Por eso apuntamos a ganar para, en la consecución, zafar de eso. No somos indiferentes a esa gran realidad”, explicó el entrenador.

Sentenció que “el empate agónico puede distorsionar el análisis objetivo y la realidad es que nuestro planteamiento, idea, ilusión y necesidad es el triunfo. Marcamos dos goles y se nos escapa el triunfo, con el 1-0 pudimos ampliar y no lo hicimos, después tuvimos que remar desde atrás”.