Universidad de Chile no lo está pasando bien en la recta final del Campeonato Nacional y sufre con el descenso respirándole en la nuca. Los Azules quedaron e la zona de promoción y este lunes tendrán que salir a jugarse la vida si es que no quieren quedar al borde de la Primera B.

El equipo dirigido por Cristián Romero llega en un momento más que delicado no solo en lo futbolístico sino también con sus hinchas. Luego de la derrota con Curicó Unido, que a la larga les dejó hoy casi a un paso de perder la categoría, un grupo de fanáticos ingresó a la cancha del estadio El Teniente de Rancagua para agredir a los jugadores.

Aunque el caso más grave fue el de Pablo Aránguiz, quien recibió amenazas de muerte y estaba a un paso de terminar su vínculo con el club. De hecho, se señaló que el 22 no jugaría más con la camiseta de la U, aunque desde el club lo descartan.

En conferencia de prensa, el técnico Cristián Romero explicó la situación en la que se encuentra el extremo y recalcó que cuenta con él para la recta final. "Están todos a disposición, yo determinaré quien entra jugando o citado. Entre ellos está Pablo".

Relojito también detalló cómo es que está intentando levantar al equipo en un momento complicando como el que están viviendo. "Tenemos que entregar el máximo, porque es la única manera de estar cerca del logro. Si uno se reserva o está a medias, se pone en riesgo el resultado. Ellos entienden eso, así lo mostraron en Chillán y en el Clásico Universitario".

"Es lo que estamos llevando a cabo, de ser intensos, de recuperar lo más rápido posible. Si uno lo hace con esa intensidad y acelerando transiciones, cualquier equipo puede hacer daño. Este es el partido, no me preocupa lo que nos queda. Mi energía y concentración, al igual que los jugadores, está con O’Higgins", agregó.

Apoyo psicológico y formación definida

Una de las quejas que tuvo el plantel de la U tiempo atrás fue que se quedaron sin apoyo psicológico tras la repentina salida de Eugenio Lizana. Sin embargo, su reclamo tuvo frutos y ya cuentan con un respaldo emocional.

"Lo venimos trabajando con un staff en apoyo, eso es un soporte que nos ha permitido el club para desarrollar. Las cosas que hay que hacer, hay que hacerlas y es lo que hemos intentado. Nada nos sobra, todo lo que sume para revertir esto, bienvenido sea. Estamos fuertes, sabemos la responsabilidad, el lugar donde estamos y que hay mucha gente en el país preocupada", detalló Romero.

De hecho, Relojito va más allá y recalca que evita pensar en un desastre al final de temporada descendiendo a la Primera B. "Yo no me pongo en el escenario que hablan todos, tenemos que abstraernos de eso y mejorar lo futbolístico para ganar el lunes".

Finalmente y pese a que todavía quedan tres días, aseguró que ya tiene listo al equipo. "La formación no la puedo dar, porque los jugadores deben ser los primeros en saber. Yo la tengo clara, pero se verá en el momento. El rival juega con eso y tendrán días para preparar el partido".