Carlos Campos, el ídolo de Universidad de Chile y figura del Ballet Azul no lo pasa bien. Con 82 años el ex delantero vive en carne propia lo que significa la vejez en este país.

Actualmente vive solo tras la muerte de su esposa. Sus hijos y nietos lo visitan con recurrencia y una mujer lo ayuda en la casa tres veces a la semana. El Tanque tiene una memoria envidiable, pero el cuerpo ya le pasa la cuenta.

“Así es, me acuerdo de todo. Aunque ahora estoy un poco complicado. Ya no tengo meniscos en ninguna de las dos rodillas. Hace un año y medio que murió mi señora. Estoy solo acá, vivo solo. Todavía no lo puedo superar. No sé si siempre será así, no he podido nunca conversarlo. La echo mucho de menos”, dijo Campos en una extensa entrevista con The Clinic.

Agregó que “no me dejan salir. Sólo cuando voy al médico o alguna cosa que me invitan del Mundial del 62, un homenaje. Pero ahí yo pido locomoción, porque ya no manejo. En el fondo, estoy inválido. No puedo salir. Salgo aquí a la calle, me subo a un auto y me llevan. Después, tengo que volver a estar en la casa y nada más. Hay días que no me levanto. Llevo como cuatro meses sin salir”.

Siguió complementando: “la otra vez la U nos hizo un homenaje en el estadio, yo tuve que salir con el bastón. No me gusta que me vean así, la verdad es esa. No quiero que me vean tan cagado, porque apenas camino. Mi nieto a veces me dice: cálmate, tata. No puedo, le digo. No hay caso. Mi hija me dijo hace unos seis meses: papá, tienes que acostumbrarte a vivir solo. Puta que es fácil decirlo”.

Incluso, el Tanque Campos reconoció que “le tengo mucho miedo a las enfermedades. Y más miedo a la muerte”.

Por otro lado, el ex seleccionado nacional contó que “cuando falleció mi señora de la U llamaron a mi hija y me mandaron dos millones de pesos para los gastos del funeral. Por eso cuando me invitan a cualquier cosa, yo voy”.

Sentenció que “también mandaron a hacer una U gigante de flores. Cuando la vi no lo podía creer. Era preciosa, pero después no teníamos cómo llevarla a Putaendo ¿Sabes lo que es viajar con esa U en una camioneta? Llegamos y la gente estaba admirada. A mí me impresionó. Me dijeron que la hicieron en la Pérgola de las Flores. Estuvieron trabajando toda la noche. La idea fue de Carlos Heller”.