Han pasado ya tres años desde que Ángel Guillermo Hoyos dejó de ser entrenador de Universidad de Chile luego de una semana del terror donde perdió 1-6 ante Unión La Calera y 0-7 ante Cruzeiro por Copa Libertadores.

Pese a que estaba en las posiciones de avanzada en el Campeonato Nacional y que había salido campeón el año anterior, el entonces presidente de Azul Azul, Carlos Heller, que había viajado junto a la delegación universitaria a Belo Horizonte, cortó el vínculo anticipadamente.

En conversación con La Tercera, Hoyos recuerda a la U como "un sentimiento, es una de las etapas más felices de mi vida. No lo puedo esconder, no solo a nivel profesional, sino también familiar. Luego dar gracias a la institución que permitió compartir con jugadores de primer nivel, que sacaron campeón a la U, la estrella número 18".

El ex entrenador de la selección boliviana reconoce que las dos goleadas sufridas en en cuatro días, detonaron su salida.

"Lo que pasa es que se dio una cosa que nadie esperaba. Tuvimos una semana en la que nos fue muy mal, que fue de terror y obligó a nuestra salida del club. Fue muy doloroso", reconoce.

Hoyos además recuerda que no pudo dirigir a la U en su último partido por Conmebol, que tuvo problemas a la hora de comunicarse con su cuerpo técnico

"Ese es el dolor que uno tiene. La forma que se dio, yo viendo el partido en el hotel con un colaborador, llamando a la cancha con las líneas colapsadas, con mucha gente en el estadio, no llegaban los mensajes de WhatsApp, una odisea… Pero bueno, lo acepto, siempre asumí la responsabilidad", cerró.