Universidad Católica festeja, con absoluta justicia, tras obtener su segunda victoria en esta fase de grupos de la Copa Libertadores. El merecidísimo triunfo cruzado en San Carlos de Apoquindo contra Gremio de Porto Alegre da razones para el optimismo. 

El solitario gol de Sebastián Sáez fue, incluso, un cortísimo premio para un conjunto cruzado que fue muy superior en varios compases del partido. Y cuando no lo fue, supo dosificar las fuerzas haciendo ver mal a un equipo que fue campeón de América hace dos ediciones. 

Mira el gol:

 

¿Da para emocionarse? No, pero la parcialidad cruzada tiene motivos suficientes para ilusionarse con esta versión del equipo que dirige Gustavo Quinteros. Capaz de competir en el concierto internacional, el cuadro que se llevó el triunfo frente a un brasileño hace que los cruzados sueñen con una clasificación que hace ocho años no se da.

Mira cómo fueron las incidencias del partido por aquí: