Gran revuelo ha generado esta semana el supuesto triángulo amoroso entre la actriz China Suárez, el futbolista Mauro Icardi, y su esposa, la modelo Wanda Nara.

La polémica se ha alimentado de dimes y diretes entre los involucrados, y esta jornada finalmente la ex de Benjamín Vicuña entregó su versión de los hechos. "Escribo esta carta para bajar el ruido externo de mentiras, maltratos y miradas inclinadas en la construcción de historias manipuladas para, una vez más, ser el chivo expiatorio de la violencia mediática", publicó en su Instagram Suárez.

Lo cierto, es que China Suárez ha sido posicionada como la “tercera en discordia” por los medios trasandinos, debiendo enfrentar fuertes acusaciones, especulaciones y juicios que trascienden los hechos actuales, sacando a la luz acontecimientos de su pasado y examinando sus relaciones anteriores.

De hecho, por estos motivos se la vinculó con una condición anómala que solo afectaría a mujeres: el Síndrome de Fortunata.
 

¿Qué es el Síndrome de Fortunata?

El Síndrome de Fortunata es una condición anómala, que no podría considerarse ni enfermedad, ni trastorno, sino que una condición o fenómeno social que afecta a mujeres y que se caracteriza por seguir un patrón de conducta determinado por una fuerte dependencia a los hombres.

En concreto, el Síndrome de Fortunata se refriere a mujeres propensas a mantener relaciones con hombres casados.

Sin embargo, el sicólogo y miembro de la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FePRA), Jorge Garaventa, explicó a Infobae que el Síndrome de Fortunata “es muy traído de los pelos y no tiene solvencia teórica”.

En tanto, el psicólogo Jorge Barraca Mairal, explicó en uno de sus estudios respecto del Síndrome de Fortunata, que “es imposible no ver allí alguna clase de sesgo cultural, o de género, o ideológico, o todo junto. Existir, existe. Pero es muy probable que su uso esté muy teñido por prejuicios que hunden sus raíces en el pensamiento patriarcal”, remarcó.