Se terminó el sueño de los octavos de final de la Copa Libertadores para Palestino. Fue un viaje sacrificado y duro para el combativo y querido equipo chileno que terminó, como no podía ser de otra forma, peleando y con todas las de la ley ante el vigente campeón de América: River Plate. 

Los de Ivo Basay mantuvieron la idea de lo hecho antes: apostar por un equipo equilibrado y experimentado, en la medida de lo posible. Pero las diferencias de presupuesto y de nivel contra uno de los gigantes del continente pesaron desde la primera mitad con el gol de Javier Pinola, cuando los árabes buscaban el arco de Armani. 

 

Y en la segunda parte, el gol de Nacho Fernández cayó como un balde de agua helada en el esquema chileno. Un error del habitualmente correcto Ignacio González le ayudó al delantero del Millonario a sentenciar la cuenta.

 

De esta manera Internacional de Porto Alegre y River Plate sellaron los pases a los octavos de final, mientras que al Tino Tino le queda el consuelo de tener que ir a buscar el boleto a la Copa Sudamericana en Lima contra Alianza. ¿Podrá?