Matías Rodríguez juega con un perro mientras realiza una sesión fotográfica para Adidas. Lejos de la presión de la cancha o de lo que vive actualmente Universidad de Chile, el argentino tiene un momento de relajo después de la traumática eliminación de los azules en Copa Libertadores.

"Lo hacemos ver como que es una crisis y recién pasó una fecha, si bien es cierto lo de la copa fue un golpe duro y nadie lo esperaba, pero esto está empezando, es la primera fecha, sí, de local, con Cobresal, debimos haber ganado. Nosotros nos quedamos con la falta de juego que no tuvimos y eso es lo que hay que mejorar. Si uno ve el plantel, si ve los jugadores que llegaron y que son importantes, se van a afianzar, vamos a ir engranando, nos va a costar un poquito más y cuando el equipo ya funcione vamos a ver más logros que fracasos", afirma Rodríguez en conversación con Redgol.

 

Una de las críticas al actual plantel, es la ausencia de referentes, usted parece hablar más en la interna que afuera

Siempre lo dije, yo trato de aportar dentro de los partidos, dentro del club, de hablar de los chicos, pero yo no le voy a contar todo lo que hago para hacerme ver, no me gusta, siempre me manejé en silencio, jugando o no jugando, en el rol que me corresponda, aconsejando por las cosas que me ha tocado vivir y en todo caso no me siento un referente, sí un jugador que lleva varios años en el club.

Le tocó vivir la mejor época de la U, ahora le toca remar con las malas...

Lo que rodea la U te hace ver como que no servis para nada, y a veces duele, pero vos estas convencido que no es así, pero al insistir alguno se la termina creyendo y baja más el nivel, en vez de rebelarse ante la adversidad, muchas veces uno se cae.

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Todos tenemos el recuerdo del 2011, 2012 por lo que significó para el club y para uno, el prestigio que uno ganó, y por ahí la vuelta no fue lo mismo, no es que me sienta en deuda, pero sé que lo puedo hacer mejor, hablo por mi y sé que hay muchos compañeros que les gustaría estar mejor y por circuntancias de equipo, de años, de momentos porqué el fútbol es de momentos, entonces hay que adaptarse a lo que hay y tratar de tirar para arriba que es la única forma que hay de salir, si uno se queda pensando "Uh el 2011 era bueno, y el 2012 era muy bueno, ya está, eso ya pasó, no puedo pensar, sí, qué quisiera no quiero ser como el 2011, quisiera ser mejor, pero hay temas, circunstancias, temas de diferente forma de juego, son variantes que uno no sabe qué puede pasar. Yo siempre digo, traéme el equipo del 2011 hoy, ¿quién te asegura que va a ganar?, está bien, tenés un plantel, pero nadie te asegura que va a ganar, son siete año más y cuando me dicen "ya no eres el del 2011", está bien, está claro que no soy el del 2011, pero tengo siete años más, había un entrenador diferente y habían jugadores diferentes, ahora no hay mejores, ni peores, sólo diferentes.

¿Le duelen las críticas?

Cuando no tienen fundamento, sí. Yo soy el primer autocrítico, si jugué mal, yo lo sé, si jugue bien, incluso si jugué bien, me recrimino si di un pase mal, pero lo que me duele es que me digan que soy trotón, me molesta y me llega porque no lo soy, yo tengo todas las estadísticas de cuando corrí, cuanto salté, y podría demostrarlo, y correr no significa jugar bien, eso está comprobado. No me gusta que me digan que no tengo actitud, eso en lo personal me molesta, porque si juego mal, lo acepto y te lo digo, pero si dices que no tengo actitud y que soy un jugador trotón, sí me molesta.

¿Le afectó la partida de Gustavo Lorenzetti?

Nos hicimos muy amigos, los que están en la U saben la relación que teníamos y nuestras familias son amigas junto a la de Guille Marino, pero sabíamos los dos que era lo mejor para él

Buscan un 10 en la U y dejaron partir a Gustavo, no se entiende

Es raro, raro, por ahí se le valora más ahora que no está, que cuando estaba acá.